Nuestra historia:
Por qué hacemos lo que hacemos
Nunca nos ha gustado mucho la típica rutina de oficina: ruido constante, muchas distracciones y altos niveles de estrés. Creemos que el trabajo debería ser diferente. Lo teníamos claro: necesitábamos un espacio seguro que todos pudieran costear. Impulsado por las limitadas opciones del mercado, nuestro fundador, Conradin Castell, comenzó a analizar la dinámica del sector con más detenimiento. Identificó tres factores principales que provocan precios excesivos:
- Canales de distribución indirectos que generan márgenes de beneficio múltiples.
- Falta de un diseño funcional centrado en la fabricación eficiente.
- Personalización excesiva que conduce a una producción ineficiente.

Inspirado por estos conocimientos, mute-labs se fundó con una misión simple pero ambiciosa: desarrollar cabinas telefónicas de alta calidad que sean asequibles para todos, permitiendo así que cada uno de vosotros termine su jornada laboral con una sensación de logro y confianza.